Si un bebé no cuenta en sus primeros seis meses de vida con una alimentación basada exclusivamente en la lactancia materna, enfrenta el riesgo de no alcanzar un óptimo desarrollo de su sistema inmunológico y cerebro, por lo que será más vulnerable a enfermedades infecciosas y un menor nivel cognitivo.
Y no obstante esta advertencia, el 50 por ciento de los recién nacidos pierden la lactancia materna exclusiva, debido a que sus mamás no pueden amamantarlos más ya sea por causas laborales, o bien debido a que prefieren darles la “fórmula” a través del biberón, para evitar “molestias” como el dolor de los pezones o pérdida de lozanía de los senos.
Al respecto, el Gabriel Cortés Gallo, director del programa Seguro para una Nueva Generación, explicó que acorde a una encuesta realizada por esta institución revela que entre los líquidos distintos a la leche materna que se emplean como complemento a la alimentación de estos bebés, se encuentran productos industrializados.
“Lo que es más grave es que más de la mitad, es decir, alrededor de 25%, han recibido leche industrializada, pese a todos los s acuerdos que se han firmado con la industria químico farmacéutica y de alimentos con objeto de evitar la promoción de la leche artificial, no natural en embarazadas y en las que están lactando”, enfatizó.
Este panorama pone en evidencia el rezago en la cultura de la lactancia materna“Cuando comparamos los resultados de esta encuesta con la Encuesta Nacional de Nutrición de 1999, las cifras son exactamente las mismas, es decir, pese a todos los esfuerzos que hemos hecho, el sector salud durante una década o más de una década, porque el Hospital Amigo del Niño y de la Madre lleva mucho más tiempo que eso, pese a todo ello, no hemos podido levantar la lactancia materna exclusiva y no hemos podido levantar la lactancia materna en alguna cantidad durante los primeros dos años de vida de los niños”.
Esta circunstancia elimina la posibilidad de que haya un porcentaje importante de mamás dispuestas a alimentar a sus hijos hasta el año: “Ciertamente las mamás salen motivadas en su egreso hospitalario y con las estrategias seguidas, más de 90% están lactando a sus niños, pero la caída de la gráfica es brutal, de tal manera que prácticamente a los 18 meses ninguna mujer está lactando a su bebé”.
Es por lo anterior, apuntó el doctor Cortés Gallo, que para impulsar la lactancia materna, el Seguro Popular diseñó en 2010 un modelo que tiene como objetivo lograr cambios de conducta y actitudes que fomenten en el personal de salud y en las más un cambio positivo hacia la lactancia materna, que incluye la creación en poco tiempo de los bancos de leche materna, dentro de los espacios de trabajo.
Yamel Viloria Tavera
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