lunes, 26 de septiembre de 2011

Los reflectores del GDF

Los reflectores del GDF:


La efervescencia política sigue subiendo de tono al perfilarse el fin de año y con ello la llegada de los momentos decisivos para cada uno de los partidos políticos y sus candidatos, que en la mayoría de los casos están más que afianzados. Luego de que los gobiernos del Partido de la Revolución Democrática (PRD), quienes han utilizado al Gobierno del Distrito Federal como trampolín para sus candidatos a la Presidencia de la República, queda demostrada la verdadera potencia de las tentaciones políticas, donde, en la escala de valores, el Gobierno del Distrito Federal está más que disputado y sobrevalorado. Para tal caso, los ejemplos emblemáticos de Cuauhtémoc Cárdenas, Andrés Manuel López Obrador y ahora el alumno incómodo del “Peje”, Marcelo Ebrard.


Uno de los aspirantes al gobierno capitalino de Acción Nacional es José Luis Luege Tamargo, actual titular de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), quien ha estado en controversia constante con funcionarios “marcelistas”. Es tal la emoción del funcionario capitalino, que ya anunció un plan a 100 años para continuar la modernización del DF, además de asegurar que no sólo será el candidato del PAN, sino el ganador de tan ambicionada urbe. Entonces, ¿dónde quedaron esas declaraciones donde aseguraba que su prioridad era concluir su gestión con trabajo y buenos resultados? ¿Será que su plan a 100 años es un proyecto de lo que no ha cumplido en cinco a cargo de Conagua?


La inconformidad de la ciudadanía capitalina va creciendo en contra de la gestión de Marcelo Ebrard, quien últimamente despide amor por los poros en Twitter, continuando a través de este medio con su precampaña. La administración de Ebrard ha golpeado a sectores que fueron carne de cañón en las votaciones del 2006, basta realizar un viaje en taxi y escuchar los comentarios sobre las altas cuotas, los gruyeros que hacen su agosto, tarjetas de circulación con “chip”, entre otras.


Por lo anterior Luege intentará arrebatarle primero la candidatura a la diputada de la ALDF Mariana Gómez del Campo y al senador Federico Doring, para luego disputar contra los perredistas, pues asegura que en el PRD sólo se han preocupado por utilizar su cargo para contender en puestos electorales y no por atender al país, acción que paradójicamente lo ha contaminado. “Un jefe de gobierno que nunca ha hecho nada, que no ha mejorado las cosas en la ciudad, cómo puede aspirar a un cargo superior. Para mí es una tragedia que los tres gobiernos electos han utilizado el gobierno”, expresó en una falsa lección ética-moral.


Lo realmente delicado para los del sol azteca es ver cómo van perdiendo adeptos por sus propios errores. La semana pasada, en un restaurante de Polanco, irrumpió un grupo armado que afortunadamente no dejó víctimas inocentes. ¿Si lo anterior no es delincuencia organizada, entonces cómo debemos llamarlo, señores Manuel Mondragón, Miguel Mancera y, sobre todo, Marcelo Ebrard? Funcionarios que se empeñan en decir que no llegamos al nivel de violencia de otros estados, mientras actúan como verdaderas reinas de la primavera.


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