jueves, 22 de septiembre de 2011

Auditorías revelan corrupción en Azcapotzalco

Auditorías revelan corrupción en Azcapotzalco:


Diputados de la ALDF llamarán a cuentas al jefe delegacional

Quedan comprobadas irregularidades en la aplicación de recursos destinados a la delegación política Azcapotzalco, y en las revisiones previas aparecen indicios que los programas de mayor prioridad no fueron tomados en cuenta.
Los diputados de los grupos parlamentarios del PAN, PRI, de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), aseguran que llamarán a cuentas al titular de la delegación, Enrique Vargas, para que explique muchas irregularidades, pero, como siempre, legisladores del PRD se oponen.
En caso de que los legisladores encuentren irregularidades, se habla de que habría una violación a la Ley de Presupuesto y Gasto Eficiente, pues los recursos son ley y deben ser aplicados como las y los diputados locales establecen al momento de la discusión del presupuesto.
Ya el vocero del grupo parlamentario del PRD en la ALDF, Alejandro Sánchez, pidió a los 16 jefes delegacionales informen sobre los aproximadamente 900 millones de pesos etiquetados por los legisladores para el ejercicio 2011 y aclaren el subejercicio que algunos de ellos tienen del 2010.
Derivado del Informe de Resultados de la Cuenta Pública que la Contaduría Mayor de Hacienda presentó ante la Comisión de Vigilancia de la ALDF, la delegación Azcapotzalco tuvo un total de 55 recomendaciones.
Los principales hallazgos detectados por el órgano de fiscalización se refieren a irregularidades en diversos contratos al adjudicar directamente obra pública por 533 mil 373.3 pesos.
En cinco contratos no se llevaron a cabo los convenios por trabajos extraordinarios y en cuatro más el área encargada de la construcción de las obras no las entregó a los responsables de operarlas.
La delegación tampoco implementó las bitácoras electrónicas para tres contratos que fueron formalizados con la Ley de Obras Públicas y servicios relacionados con las mismas, y suscribió un contrato para realizar la instalación del sistema de aire acondicionado en el Centro Internacional de Negocios Azcapotzalco, que al momento de la verificación no estaba operando.
Además, se realizaron diversos pagos en exceso por nueve millones 082.6 mil pesos; pagos injustificados por 8 millones 655 mil de pesos, y no se aplicaron sanciones a una empresa de supervisión por 820 mil 009 pesos.
Cabe mencionar que la auditoría de obra pública realizada a Azcapotzalco, fue aplicada en las subfunciones 19 y 20, cultura, esparcimiento y deporte, y urbanización, respectivamente.
Así mismo se descubrió que gente que acude a la delegación Azcapotzalco para pedir un permiso, que en algunas delegaciones se paga y en otras no, después de varias vueltas lo niegan.
Los funcionarios piden a los interesados salir de las oficinas y les dicen que el permiso no se cobra, pero que necesitaban una computadora y una impresora.
Como se negó a dar dinero, abiertamente les piden 500 pesos para comprar mesas y papelería, y nunca dan recibo, se les plantea la opción de comprarles lo que necesitan, pero dicen que no, el dinero es al momento.
También la delegación Azcapotzalco está convertida en un muladar con los 63 tiraderos clandestinos de basura y 55 cerros de cascajo que hay en la vía pública.
Durante los torrenciales aguaceros provocan encharcamientos en vialidades, fauna nociva y daños a la salud de los vecinos.
E inclusive a sólo unos pasos de la misma delegación política se ubica el tiradero mayor, sin que el jefe delegacional, Enrique Vargas Anaya, pretenda frenar, inhibir y sancionar esta práctica.

Edmundo Olivares Alcalá

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