EVOLUCIÓN DEL GOLF PARA UN PLANETA QUE TIENDE A LA DESERTIZACIÓN
Es una buena oportunidad para revisar el concepto de los campos de golf.
Hace un par de años se han publicado reportajes sobre la evolución que sufrirá el golf para convertirse en una actividad sostenible de acuerdo con los parámetros a los que obligará la escasez de agua. Y los campos en Europa y Asia se construyen no ya ecológicos, ahora todos son puramente sostenibles. Hay campos que ni rastro de césped hay, el verde que se ve en invierno es Grama que crece de manera natural y en verano se torna amarillenta, variedad vegetal que ni se riega, ni se abona, ni se fumiga y que ya se utiliza en muchos campos, europeos y asiáticos. Por ejemplo los greenes son de arena, así que la manera de hacer el golpe al green es desde luego otra, pero incluso si se construyeran de hierba, el ahorro de agua respecto a uno normal sería aproximadamente del 80%. Otra alternativa es el pasto artificial.
SOLO ES UNA REFLEXIÓN PERSONAL
En un país en el que la mayoría de los campos que se construyen, están asociados a promociones urbanísticas, vale la pena explorar y promover otro tipo de instalaciones que atraigan a los nuevos golfistas y/o constituyan un reto deferente para los golfistas veteranos.
En cualquier caso, una sana convivencia que se desahogará la presión de la rentabilidad económica, al parecer la razón por la que los campos tienen que rodearse de casas e irá abonando un cambio en la percepción de los jugadores que casi sin excepción, buscan extensas alfombras verdes cortadas al milímetro y a ser flanqueados por rios.
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