Con casi 15.000 asesinatos, 2010 fue el año más violento en México desde que inició el gobierno del presidente Felipe Calderón en 2006, cuando lanzó una lucha antidrogas en la que sigue apostando por la fuerza militar como pilar de su estrategia.
'Debemos reconocer que 2010 ha sido el más convulso y más violento en lo que va del sexenio pero, al mismo tiempo, es el año en el que el número de homicidios se estabilizó durante el segundo semestre y dejó de crecer', aseguró a la AFP, Alejandro Poiré, vocero del gobierno para temas de seguridad.
Calderón asumió en diciembre de 2006 y ese mismo mes sacó de sus cuarteles a miles de militares que desplegó por los lugares más violentos del país,
especialmente en la frontera con Estados Unidos.
Desde entonces se contabilizan unos 30.200 muertos, 15.000 de ellos este año según cifras oficiales. La mayoría de los casos son atribuidos por las autoridades a disputas entre carteles, aunque organismos de derechos humanos también han denunciado la muerte de civiles.
Asimismo, han sido capturados una veintena de capos o abatidos, siete de ellos este año, y se han incautado cargamentos récords de droga, como el de 134 toneladas de marihuana interceptadas en octubre en Tijuana, frontera con California.
Pero al mismo tiempo se multiplicaron este año las imágenes de cadáveres calcinados o colgados de puentes, las fosas clandestinas con decenas de cuerpos y las balaceras callejeras.
El gobierno respondió reforzando el despliegue de 50.000 elementos de las fuerzas armadas, pese a cuestionamientos de la oposición y grupos de derechos humanos, que señalan especial preocupación por las muertes de civiles en el fuego cruzado.
Todas las instituciones involucradas en la lucha contra el narcotráfico han sido denunciadas ante la estatal Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) por diversas violaciones.
Y Hay un centenar de expedientes por muertes de civiles, entre ellos varios niños, por fuego cruzado o baleados en retenes militares.
'En México la dinámica es de deterioro y no de mejoramiento', dijo a la AFP Edgardo Buscaglia, asesor independiente de la ONU en temas de narcotráfico.
Buscaglia considera que al medir el éxito o fracaso de una estrategia antidroga se debe tomar en cuenta también los otros delitos en los que incurren los capos, como el tráfico de armas, de personas y extorsiones, entre otros.
Esos delitos 'siguen aumentando' en México donde 'la madre de todo el problema delincuencial es la corrupción política al más alto nivel', añadió.
'Tenemos una muy fuerte preocupación de que este deterioro va a continuar con su curso hasta llevar al país a un Estado débil, por el momento hemos contabilizado en mayo 972 bolsones territoriales de 'afganización', es decir donde la presencia de la autoridad formal de Estado estaba ausente', añadió.
Uno de ellos es Ciudad Mier (Tamaulipas) dividida entre el cártel del Golfo y sus ex aliados Los Zetas. En noviembre la totalidad de sus habitantes, unas 400 familias, fueron obligados a irse bajo amenazas de muerte.
Pese a ello Poiré asegura que 'el Estado mexicano está plenamente vigente y tiene control total de su territorio. Sólo en 162 municipios, de los 2.456 que tiene México, se concentra el 80% del total de homicidios vinculados con el crimen organizado'.
La fortaleza de los narcotraficantes en México radica, según Buscaglia, en que cuentan con 'tres anillos de protección': político, económico y social.
En el económico menciona por ejemplo que hay estudios que indican que 'más del 77% de los sectores económicos de México están capturados parcialmente por grupos criminales'.
El experto menciona por ejemplo la reserva establecida alrededor de los fideicomisos, una figura bancaria que en México no exige revelar la procedencia de los recursos, como una de las razones por las que este país es 'un paraíso patrimonial' para los delincuentes.
En junio el gobierno anunció que pondría en marcha 'medidas para regular la entrada de dólares en efectivo'.
El balance del titular de la estatal Comisión Nacional de Derechos Humanos, Raúl Plascencia, tampoco es favorable. 'Los resultados todavía no son los esperados', dijo. El ombudsman se declara en contra de que los militares 'hagan la tarea de la policía'.
"
No hay comentarios:
Publicar un comentario