Moreira, el bailador...

Moreira, el bailador...:

El presidente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), el profesor Humberto Moreira, ha demostrado que el dinosaurio tricolor está más vivo que nunca, las viejas prácticas de las décadas de los años 70 y 80, que generaron una cultura de nepotismo, simulación al estilo “lopezportillista” parecen reavivarse con fuerza y convertirse en parte intrínseca de las acciones políticas y plataformas de los denominados “nuevos” priístas que buscan recuperar la silla presidencial.
El profesor, conocido por su discurso incendiario en contra de sus antagonistas políticos se encuentra metido en el ojo del huracán, pues mientras el poder Ejecutivo -encabezado por el Presidente Felipe Calderón- libra una cruenta batalla en contra de la criminalidad organizada que se encuentra en el punto más álgido, se da la denuncia de que Humberto Moreira, ex gobernador de Coahuila, retuvo los recursos del Subsidio para la Seguridad Pública de los Municipios (Subsemun), ¿qué, no todos vamos en el mismo barco?
El año pasado se destinaron 4 mil 137 millones 900 mil pesos del Presupuesto de Egresos de la Federación a los municipios y las delegaciones para fortalecer el desempeño de sus funciones en materia de seguridad pública, salvaguardar los derechos e integridad de sus habitantes y preservar las libertades, el orden y la paz públicos. ¿A quién le pueden reclamar los coahuilenses?
La magia de la televisión nos vende a cucharadas la fórmula de los spots, sólo en lo discursivo, un personaje diferente marcado por el pleonasmo, luchador que nos interroga mirando fijamente a la cámara: “Mucha gente me pregunta ¿para qué sirven los políticos? Sirven para servir, y si no sirven para eso, no sirven para nada”, reza el mensaje; por si fuera poca cosa el diputado de Acción Nacional, Carlos Ulises Orta Canales, dio a conocer que Moreira dejó a la entidad con una deuda de 8 mil millones de pesos.
El jocoso líder del PRI ofrece conferencias de prensa donde a los representantes de los medios ofrece gráficas mostrando cómo se han equivocado las estrategias de panistas y perredistas, según el mismo mensaje que se transmite en los canales televisivos menciona con voz firme y convencedora: “yo hablo así de claro, porque soy parte de una nueva generación de políticos, que habla y piensa diferente, porque queremos un mundo diferente”. ¿Será?
“La única licencia que voy a solicitar es la de manejo”, dijo, y acusó al Gobierno Federal de orquestar una campaña de desprestigio, muy bien diseñada, en su contra, a partir de la deuda del estado de Coahuila. Las auditorías nos dirán quién tiene la razón.
Y reiteramos la pregunta que hace la gente: ¿Para qué sirven los políticos?

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